Con la intervención de integrantes de diversos equipos de investigación, el ISEP participó del evento virtual organizado por la Universidad Provincial de Córdoba.

El 10 y 11 de junio se desarrolló la tercera edición de las Jornadas de Difusión y Promoción de la Investigación de la Universidad Provincial de Córdoba, en conjunto con la Red de Universidades Provinciales. El evento se realizó de manera virtual y contó con la participación de diversos grupos de estudio e investigación del ISEP.
Dichos grupos se fueron conformando -desde el 2018- con la intención de reconocer, de poner en valor la producción de saber ligado a la experiencia de enseñar y de trabajar en instituciones educativas de la Provincia. En ese marco se formaron y fueron identificando, a partir de algunas preguntas, problemas que interpelan a las políticas de formación docente.
Por tal motivo, las jornadas resultaron el marco propicio para compartir las diferentes ponencias ya que el evento tuvo por objetivo dar a conocer las líneas de investigación prioritarias desarrolladas tanto en las universidades como en las instituciones educativas y científicas y que buscan dar respuesta a las necesidades regionales, de la provincia y del país. Además, se procuró fortalecer y consolidar los lazos entre las distintas instituciones participantes, los investigadores y los campos disciplinares, a la vez que se habilitó el diálogo entre diferentes enfoques y perspectivas.
Durante la jornada del 10 de junio, dos de las exposiciones se enmarcaron en el eje “Prácticas docentes y profesionalizantes”. Luciana Cometto -coordinadora general de la Formación Docente Complementaria- y Luciana Dadone -coordinadora del área de Producción Audiovisual del ISEP- presentaron la ponencia “Cartografía de la formación docente en Córdoba. El escenario del primer normalismo en la provincia”.
Esta presentación surgió de la convocatoria de un grupo de estudio abocado a reconstruir el origen y desarrollo de las instituciones formadoras de docentes en las distintas geografías de la provincia de Córdoba a lo largo del siglo XX. El trabajo encuentra su justificación en la identificación de un área de vacancia en relación a esta temática, con fuertes referencias nacionales pero débilmente narrada desde la particularidad provincial. En ese punto, la investigación se constituye como un insumo relevante tanto para la formación docente como para la comunidad educativa en general.
El proyecto -cuyo objetivo está vinculado a la difusión del conocimiento fomentando la comunicación pública de la ciencia- generó distintas producciones derivadas de la propia investigación: entre ellos, escritos académicos, videos documentales, series de podcast, galerías fotográficas y rutas de la formación docente como un recorrido pedagógico por las distintas geografías de la provincia.
Por otro lado, durante la misma jornada se presentó la ponencia “Notas sobre la experiencia de estudiar. Un estudio exploratorio sobre la formación docente continua en ISEP-IFDA”, de la que participaron las áreas de Información, evaluación e investigación educativa y de Coordinación de IFD asociados. En esta exposición los equipos compartieron lo trabajado en un proyecto vinculado a grupos focales con cursantes de diferentes Institutos de Formación Docente asociados al ISEP, en los que se indaga sobre la experiencia de cursada en el instituto.
Entre algunos de los tópicos que arroja la investigación se destaca el rol del tutor, su importancia en la experiencia formativa de los cursantes; la noción de modalidad combinada y cómo se articula con las nuevas tecnologías; y los nuevos entornos virtuales de enseñanza y aprendizaje.
Ya en la segunda jornada, se presentaron tres ponencias más. “Dar clase en WhatsApp”, a cargo de Paola Roldán -coordinadora de la Especialización en Educación y Medios Digitales-, expuso los resultados de un estudio realizado desde 2020 (en el marco de las propuestas de formación) que evidenció la necesidad de registrar y documentar el modo de dar clases en las escuelas en un escenario alterado por la emergencia sanitaria.
En esta documentación, de más de 1500 prácticas de docentes de todos los niveles del sistema educativo de Córdoba, se advirtió el uso prioritario de WhatsApp en casi un 90% de los casos, lo que llamó a la reflexión e indagación sobre los nuevos escenarios educativos, tanto aquello que se quiere producir en ellos como lo que se necesita fortalecer y atender en esta coyuntura.
También se presentó “Desafíos de la igualdad educativa en el escenario de la pandemia”, a cargo de la directora del ISEP, Adriana Fontana. En esta ponencia se ofrecieron algunas reflexiones que surgen de los estudios e investigaciones sobre la igualdad en el campo educativo y de la experiencia de trabajo en la modalidad combinada desarrollada en el ISEP desde 2016.
Entre los tópicos que se incluyeron se destacan las prácticas docentes cotidianas, los modos habituales de la enseñanza y el ‘dar clases’ en medio de un contexto de pandemia, los problemas surgidos por aspectos como la heterogeneidad de los grupos, la asistencia, la presencialidad y las desigualdades sociales. Ante esto, la disertante convocó a la pregunta por la enseñanza, por la escuela democrática e inclusiva que no renuncia a la experiencia de la igualdad.
La última ponencia del día fue “El laboratorio como espacio de exploración, análisis y producción con y sobre los medios digitales”, del eje temático “Innovación tecnológica en los diferentes campos de conocimiento”, en la que intervino el equipo del área de Producción de Materiales Educativos en línea del ISEP.
En ella se compartieron algunas reflexiones sobre el laboratorio como dispositivo didáctico y su relación con la educación y los medios digitales. Se puntualizó en los aspectos particulares del mismo como así también en las experiencias de estudio y de aprendizaje que habilita.
La experiencia resultó el marco propicio para socializar las exploraciones que se producen en los grupos de estudio, cuyos objetivos sintetiza la directora del ISEP: “Nos proponemos registrar, reflexionar y compartir aquello que nos ofrece la experiencia docente y contribuye a la ampliación del campo de saber pedagógico. Es también un modo de acompañar-nos en este tiempo, en el que la incertidumbre nos inquieta pero que, si la afrontamos entre colegas, entre instituciones, podemos traducirla en aquello que habilita la novedad, un nuevo comienzo”.