En el marco de cada propuesta de formación que ofrece el ISEP, se pone en movimiento un dispositivo pedagógico que articula la experiencia de cursado y que cuida la calidad en todas sus dimensiones. Allí emergen las figuras centrales de los docentes-tutores, pensadas en un rol que acompaña y que entrama un diálogo pedagógico en el marco de una modalidad combinada. Te contamos, en esta nota, las singularidades de su oficio.
El oficio del docente en el ISEP asume características singulares, en la medida en que se desarrolla tanto en el entorno virtual como en encuentros presenciales. Esta modalidad combinada supone una tecnología escolar que se construye a partir de un modo particular de concebir la formación docente, el cual revaloriza prácticas históricas de enseñanza en articulación con los aportes propios de las tecnologías y de los medios digitales. En este sentido, las clases en el ISEP desafían la experiencia tradicional del estudio.
En la modalidad combinada, el aula expande sus límites y vuelve porosas las fronteras entre el espacio físico y el digital. El tiempo de estudio se abre a otras experiencias que no solo incluyen la simultaneidad de las instancias presenciales, sino también la asincronía que habilita la clase en el aula virtual. La heterogeneidad de lenguajes encuentra su mejor posibilidad de expresión en ambos mundos y el docente-tutor es quien tiene la responsabilidad y el privilegio de acompañar esos pasajes y esas transiciones apuntalando los hilos que los atan. Un aula en una tarde calurosa, un mate compartido, una conversación en un foro, una devolución a tiempo con la palabra oportuna son escenas que se funden y se estrechan en torno al espacio común entre colegas, estudiantes y tutores.
Los docentes-tutores son quienes asumen, en la modalidad combinada, la mediación pedagógica para propiciar, favorecer y acompañar los procesos de enseñanza y aprendizaje que se llevan a cabo en las diversas propuestas formativas que, junto con los dispositivos y sus diseños pedagógicos, orientan y definen nuevas formas de asumir el rol de la tutoría en la educación combinada.
“En la definición del tutor caben conceptos clave de la pedagogía: acompañamiento, andamiaje, orientación, ayuda y otros que ganan legitimidad por su importancia para la educación”, describe la coordinadora del área de Gestión de la Cursada, Marcela Ramos.
Esa área está en permanente contacto con los tutores y con las tutoras. “Tiene como objetivo acompañar las definiciones educativas y pedagógicas del ISEP, sostenerlas y compartirlas con los docentes que cursan nuestras propuestas a lo largo de su desarrollo”, resume la coordinadora, quien –con su equipo– acompaña a los tutores desde el inicio de su formación en el ISEP, a través del Seminario de Formación para Tutores, y luego durante la implementación de las propuestas en la modalidad combinada.
“Este seminario de iniciación –que se cursa cada año en una nueva edición– ofrece una formación acorde con las características propias de la educación virtual, en un entorno combinado”, explica Florencia Galera, integrante del equipo de Gestión de la Cursada. “En él se promueve un proceso de formación situada que permite a los equipos docentes responder a las exigencias y a las necesidades de una formación continua e inicial”, agrega.
Así, el seminario intenta romper con la idea preestablecida que puede tener la enseñanza en la virtualidad y abrir un mundo de posibilidades y de escenarios para proyectar la tarea del tutor. Galera detalla: “Es parte de esa lógica de la que nos habla Larrosa: el profesor primero estudia, la materia de estudio no es una herramienta o un instrumento, sino algo que debe cuidarse, que debe tratarse con respeto. Con esta premisa nos introducimos en una de las principales formas de pensar la tarea del tutor. Es estar atento, la atención completa y entregada sobre la materia de estudio, la forma de acceder a ella y el encuentro con el que estudia”.
Los tutores y su rol fundamental en el ISEP
¿Quiénes son los docentes-tutores? ¿Qué significa acompañar pedagógicamente a otro? ¿Cómo es ese acompañamiento a otro docente-colega? Estas son algunas preguntas interesantes para pensar la figura del tutor y de la tutora y su tarea dentro del ISEP, teniendo en cuenta el contexto de enseñanza que contempla la modalidad combinada.
“El tutor construye con sus colegas cursantes una trayectoria de cursado. Promueve el uso de la palabra, debate en el marco de intercambios fundados y del respeto a los saberes que devienen de la experiencia profesional en las escuelas, y hace presente el sentido de una comunidad que estudia. No es solo el vínculo tutor-cursante lo que configura su oficio en la virtualidad, es la comunidad de estudio la que construye, en su paso, saberes en torno a un objeto”, profundiza Ramos.
Y continúa: “El diseño de las actividades y la programación de determinados tiempos y recursos para el estudio proveen de diferentes formas para pensar la cursada entre colegas docentes. El quehacer pedagógico del tutor se teje en una trama compleja entre la figura de quien acompaña, quien planifica y resguarda los procesos de enseñanza y quien interviene y modera las diversas formas de participación durante la cursada. Los cursantes y los tutores coinciden en esta característica clave en el rol del tutor: el que acompaña”
Por otra parte, la coordinadora del área destaca el valor de la comunidad colaborativa de estudio, que se logra con la gestión de los tiempos, recursos y espacios “para hacer posible la experiencia de aprender en entornos combinados, que propician un espacio y un tiempo de lo común como un bien en sí mismo, sobre el cual es posible aprender y hacer que otros puedan enseñar la experiencia”.
Se propicia que las distancias, representadas en tiempo y/o espacio, no constituyan un obstáculo para el aprendizaje, sino que posibiliten nuevas formas para comprender la materia de estudio que se aborda en un módulo en particular.
“En el ISEP hemos insistido en la configuración e intensidad de los debates y en su rigurosidad académica como presupuestos para gestionar las aulas y los espacios de intercambio virtual de los equipos docentes. En los presenciales, es factible producir saber sobre el camino recorrido en la virtualidad y demarcar nuevos senderos por los cuales encontrar la palabra”, destaca Galera.
Para Ramos, entonces, cuando se piensa en las propuestas formativas en la modalidad combinada no solo interviene lo que se enseña, las modalidades y los dispositivos, sino que también es igualmente importante la formación de los tutores “como uno de los pilares fundamentales sobre los que es posible afianzar la formación docente”.
El acompañamiento como categoría clave de las tutorías
Un interrogante que surge es por qué agregamos a la condición de docente la de tutor: docente-tutor. ¿Qué le aporta de nuevo esta categoría a lo que ya se conoce sobre la de docente?
“En el oficio de la docencia, el ser tutor/a es una manera más de explicitar las razones por las cuales un estudiante, un colega, puede sentirse acompañado y sostenido por otro. Un otro que en su rol docente ejerce una forma más de acompañamiento. El acompañamiento, en su forma originaria, recupera la imagen o figura del tutor que recorre un camino, que juega con la proximidad y la distancia junto a colegas con trayectorias que ejercen una autonomía devenida de su propia condición de profesionales de la enseñanza”, sostiene Galera.
Finalmente, y en relación con los intercambios y con los modos de comunicación que demanda ese acompañamiento, se emplean espacios y recursos establecidos con el objetivo de, entre otras cosas, proveer orientaciones claras y oportunas a los cursantes en un entorno que, por su propio carácter, las demanda.
“El lugar privilegiado de encuentro es el aula de cursado, pero se añaden otras vías mediante el correo de los cursantes y en ocasiones, según la necesidad, comunicaciones personales o tutorías presenciales para orientar la cursada”, expresa Ramos y asegura, en ese sentido, que para los tutores y las tutoras “la comunicación en sus diversas instancias es el medio privilegiado para hacer posible el diálogo pedagógico y para nutrir, a partir de diferentes recursos y espacios, la experiencia de estudio”.
Cómo citar a este artículo:
Instituto Superior de Estudios Pedagógicos. (2020). Una mirada a la práctica pedagógica de las tutorías en el ISEP. Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba.